Hace años en una visita a su masía, Don Jesús Masferrer me contó la historia del abeto más conocido de la navidad. Entre 1860 y 1870 un enamorado de los bosques y propietario de una finca en la comarca de Osona introdujo en ella un abeto que sólo crecía en las serranías de Andalucía.

Este viajero y amante de la naturaleza era su bisabuelo, se llamaba Juan Masferrer. El abeto que trajo consigo era compacto, de un verde intenso, lento de crecimiento pero resistente a enfermedades, a la falta de agua y al frío. Era un pinsapo.

También fue a buscar, mucho más cerca, al Montseny concretamente, abetos blancos que crecían allí de manera espontánea. Le gustaban los árboles y, poco a poco, construyó un bosque de coníferas y frutales y abrió la puerta a que sus sucesores se dedicaran a la producción de abetos y de cedros.

 

El nacimiento de una nueva especie: el abeto de Masjoan

Cien años después, en la década de los 60, el viento del invierno y las tormentas eléctricas de verano acabaron por abatir los primeros ejemplares que trajo Don Juan. Pero sin querer, aunque en aquellos años se comenzaba a intuir, habían dejado una descendencia insospechada. Al principio, en la casa se le llamaba el abeto híbrido para diferenciarlo de los demás, pero en realidad era una nueva especie.

En 1955, Don José Elorrieta, un experto ingeniero en nuevas especies, recibió vía avión desde la finca 500 ejemplares que se plantaron en Madrid para su estudio, en los viveros de Puerta de Hierro. Era la primera vez que estos árboles crecían en el centro de la península. Su desarrollo fue un éxito y se confirmó que había nacido una nueva especie. Se llamó abeto de Masjoan en honor a la finca donde nació. Cuando se extendió su plantación por Cataluña, un productor que estaba organizando los viveros ‘Plantarium Breda’, exigió un nombre para editar un catálogo de sus árboles, y un reverendo, conocido de la familia, el padre Cañigueral, que visitó la finca en 1957, tradujo el apelativo al latín. Por eso, su nombre científico actual es Abies x masjoannis.

 

El abeto de Masjoan es el más utilizado en la zona del Montseny

Esta especie es la más utilizada en la zona del Montseny y en todas las masías y campos de producción de Espinelves. Muchos de los árboles que se plantan para celebrar la navidad en plazas, calles, además de en nuestras casas, pertenecen a esta estupenda especie, fruto de la intervención conjunta del hombre y de la naturaleza. Tiene el crecimiento rápido y esbelto heredado del padre, y es rústico, resistente, de hojas densas y duraderas, por parte de madre. De todos es conocida la feria de Espinelves. En ella, el 90% de los árboles que se venden son Abies x masjoanni.

Esta historia de comunión entre lo que nos brinda la naturaleza y nuestra sabiduría ha sido fecunda ya que ha creado una nueva especie de árbol, ha cambiado un paisaje, ha creado riqueza en una región y ha ayudado a fomentar la tradición cristiana de la Navidad y un espíritu de respeto a la naturaleza. Y a mi personalmente, este árbol tan especial me lleva hasta el recuerdo de una clienta muy querida, y que sigue muy presente, especialmente en estas fechas. Espero de corazón que disfrutéis de unos días de reencuentro y serenidad.

¡Felices Fiestas! 

Manel Vicente Espliguero

Paisajista